Pese a que cada vez más personas en nuestro país celebran Halloween, la gran mayoría de los chiapanecos sigue festejando el Día de Muertos, celebración que tiene su origen en los antepasados prehispánicos y que sirve para recordar con ofrendas a los familiares o personas cercanas que han fallecido.
“La tradición de pedir calabacita no se pierde y aunque no parezca cada año va incrementando. Los disfraces tradicionales siguen siendo de los más vendidos, la catrina, el catrín, la llorona y diablitos son de los que más buscan”, mencionó Doña Edelmira Nájera Peña.
En Tuxtla Gutiérrez la renta y venta de disfraces comenzó desde hace algunos días, y uno de los lugares de mayor tradición es Disfraces de Fantasía Kathia, negocio local que tiene más de 28 años y del cual es propietaria Doña Edelmira.
“Para nosotros es una fiesta grande, sobre todo porque familias completas vienen a adquirir sus disfraces y es maravilloso ver a abuelitos con sus nietos e hijos. En estos tiempos tan difíciles que pasamos es un momento apropiado para disfrutar que estamos vivos y que podemos seguir la tradición de rendirle tributo a nuestros muertos”, indicó Doña Edelmira, quien utiliza gran parte de sus ganancias de estas fechas para ayudar a diferentes fundaciones.
Doña Edelmira no descartó que más gente disfrute del festejo del Halloween, sin embargo los padres de familia tratan de unir ambas fechas para que los pequeños le saquen provecho al disfraz.
“Cada año hay disfraces de temporada que son muy pedidos, este año la gente solicitó el del payaso ESO y Anabelle, pero por lo general lo usan más los jóvenes. Nuestra tienda comienza a realizar los pedidos de disfraces desde principios de septiembre y para estas fechas muchos ya se agotaron”, mencionó Doña Edelmira.