A propósito del inicio de diciembre; lo trajo una familia de origen alemán que habitó la Avenida Central y que fue pionera en el negocio de la ferretería: Roberto Ramos Maza
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.- A mediados de la década de los 20 del siglo pasado, Tuxtla se sorprendía con la llegada de la costumbre del árbol de navidad, compartió en redes sociales el maestro, Roberto Ramos Maza.
El estudioso de la cultura e historia de Tuxtla Gutiérrez, publicó una postal en la que detalló que el histórico acontecimiento, “sucedía en la casa de una familia de origen alemán en plena Avenida Central.
“Se trata de los Seippel y Kramer, quienes fueron pioneros en el negocio de la ferretería en Tuxtla Gutiérrez; tuvieron un negocio que se llamada El Globo”, detalló Ramos Maza.
La foto -propiedad de Roberto Ramos Maza– fue tomada hace más de 100 años en una casa ubicada donde ahora se encuentra el Edifico Maciel en la esquina que conforman la Avenida Central y la 2a poniente.
La imagen también coincide con los primeros estudios fotográficos que llegaron a la capital de Chiapas; uno de los pioneros en aquella época fue Ángel Ocampo, relató el experto.
El árbol de navidad generó controversia en la sociedad de aquellos años; anteriormente el arraigo para los creyentes católicos era poner el nacimiento de Jesús.
“No era una costumbre que estuviera arraigada, de primera instancia se creía que el árbol de navidad era de origen protestante.
“En aquel entonces existía una persona muy conocida por la sociedad Tuxtla, se llamada Onésimo Gómez, originario de Ocozocoautla, quien ponía nacimientos y arreglos florales en iglesias”, recordó.
Roberto Ramos Maza explicó que el árbol de navidad, así como el personaje de Santa Claus, se fue imponiendo conforme comenzaron a llegar productos industrializados.
“Un gran vehículo de popularización fue el cine, al ver las películas de Hollywood, muchas personas adquirieren costumbres a través de películas que permitían conocer otras culturas”, concluyó.