San Cristóbal de Las Casas, Chiapas.- El maltrato psicológico luz de gas o gaslighting se denomina así por una obra de teatro de 1938, luego fue adaptada al cine en 1944, ‘Gaslight’, protagonizada por Ingrid Bergman. Consiste en hacer creer a la víctima que vive en una realidad falsa y que esa distorsión se debe a fallos en su memoria o alteraciones mentales.
Este tipo de manipulación puede parecer sutil pero, es peligrosa, pues conlleva a mantener relaciones tóxicas, a desarrollar inseguridad, baja autoestima y el depender de terceras personas, hasta llegar a aislarte de tus seres queridos.
Algunas señales de este tipo de maltrato psicológico son:
– Dudas sobre la capacidad de recordar bien.
– Cuestionas tu juicio y tus percepciones.
– Te sientes vulnerable e inseguro.
– Estás decepcionado de ti mismo.
– Asumes que los demás están decepcionados de ti.
– Te cuesta tomar decisiones.
El abuso y la violencia no son exclusivas de las relaciones de pareja, podemos ser víctimas de nuestros propios padres o familiares, jefes e incluso, amistades. Sin embargo, es posible salir de una relación dañina, aprendiendo a construir otras más sanas. Si bien todos estamos expuestos a sufrir este tipo de manipulación, existen formas de evitar ser víctimas del gaslighting.
Procurar mantener una buena autoestima, confiar en nuestra memoria, rodearnos de personas que nos hagan sentir bien, no buscar la aprobación constante de los demás, poner límites y alejarse de personas tóxicas, pueden ser algunos métodos de autocuidado que nos ayudarán a salir de una relación amorosa, familiar o laboral que nos violente de esa manera. Acudir con un psicoterapeuta es también fundamental, en el caso de que ya seamos víctimas de una situación así.