Pérdidas del 60 hasta el 100 por ciento es lo que estiman empresarios turísticos de Chiapas tras el anuncio del cierre de playas en cinco municipios del 18 de marzo al 18 de abril, así como la aplicación de la Ley Seca los fines de semana de ese lapso.
Alfonso Cruz Niño, coordinador Estatal de Hoteles y Moteles de Chiapas, consideró que esta medida es desproporcionada y ambivalente, pues en el estado predomina por varias semanas el semáforo verde, lo que indica que hoteles podrían estar abiertos al 100 por ciento con las medidas de sanidad.
“Es un duro golpe para todos, porque ya estábamos preparados para la Semana Santa y volvemos a caer. La medida más pertinente sería prohibir eventos masivos en playa, pero no cerrar las mismas, y tener un aforo restringido en restaurantes pero sí venta de bebidas con alimentos”, propuso.
Luego del anuncio, la coordinación a su cargo tuvo acercamientos con la Secretaría de Gobierno y la Secretaría de Turismo, para poder revertir estas restricciones que han puesto al límite la economía de las y los hoteleros por tres ocasiones y la segunda en plena Semana Santa.
“Teníamos la esperanza de tener turismo local en este año, pero parece ser que no; entendemos que es en pro de la salud pero creo que pueden haber otras medidas sin llegar a esos extremos”, agregó.
Derivado de la pandemia por el COVID-19, muchos hoteles y moteles de Chiapas han cerrado, por lo que no existe un padrón actualizados de cuántos empresarios se verán afectados.
Finalmente, Alfonso Cruz aseguró que se han capacitado y han implementado las medidas de sanidad en sus negocios para garantizar que quienes llegan, estén con plena confianza de que no habrá contagios.