El 82 por ciento de las llamadas que los chiapanecos realizan al 911 son falsas, esto según datos de la última Estadística Nacional del Número de Atención de Llamadas de Emergencia 9-1-1 que realizó la Secretaría de Gobernación.
Dichas cifras corresponden al primer trimestre de 2018 Enero-Marzo, en donde se señala que a nivel nacional se tiene un registro de 22,774,791, de las cuales 3,673,034 son reales y 19,101,757 improcedentes.
Chiapas realiza un total de 327,620 llamadas, lo que significa , de éstas más del 80 por ciento son falsas, es decir 8 de cada10 llamadas que hacen los chiapanecos no son reales.
Del total de llamadas el 70 por ciento son en el rubro de seguridad, 11 por ciento en el médico, 7 por ciento protección civil, 1 por ciento servicios públicos, ocho por ciento asistencia y dos de otros servicios.
En lo que refiere al total de llamadas improcedentes, Chiapas tiene un mayor porcentaje en el sector de otras llamadas de no emergencia, le sigue llamada de bromas de niños, jóvenes adultos jugando y por ultimo llamada muda.
Lamentablemente pese a que se homologó el número de emergencia 911 los problemas con las llamadas falsas en México no cesa, y es que a nivel nacional 7 de cada 8 del total de las llamadas al 911, son falsas.
Los estados con mayor numero llamadas falsas son Ciudad de México, Estado de México, Jalisco, Veracruz, Guanajuato y Baja California; Chiapas se encuentra en la media nacional.
Las llamadas falsas son una evidencia de la falta de cultura social ante una situación de crisis en nuestro país.
A nivel federal, en el Congreso se han presentado cuatro iniciativas para sancionar este tipo de conductas, y mientras que una ha sido desechada, las tres restantes están pendientes de discutirse en comisiones.
Irónicamente, de la entidad con mayor cantidad de llamadas reales, es Lázaro Gutiérrez, el primer mexicano con sentencia de cárcel por hacer una llamada falsa al 911. Originario de Monterrey, Nuevo León, fue sentenciado a cuatro meses en el penal de Topo Chico, y aunque bien podría recurrir a algún recurso legal para evitar la cárcel, el caso sienta un precedente para futuros casos con “bromistas“.