Manejará millones… Jorge Betancourt, alfil del exgobernador y de la dos veces senadora, fue designado como delegado de la Conagua.
La gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado Pineda, dio la bienvenida a Jorge Alberto Betancourt Esponda como director general de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) en la entidad, durante una reunión de trabajo centrada en proyectos hidráulicos prioritarios.
El nombramiento generó reacciones en Chiapas, donde el exfuncionario acumula múltiples señalamientos por presuntos actos de corrupción, desvío de recursos y conflictos políticos durante su paso por la administración pública estatal.
Betancourt Esponda, identificado como cercano a Manuel Velasco Coello y a la senadora Sasil de León Villar, se desempeñó como secretario de Obras Públicas y Comunicaciones, así como director del Instituto de Infraestructura Física Educativa (Inifech). En ambos cargos fue señalado por constructores, legisladores y ciudadanos por actos de opacidad y simulación administrativa.
Uno de los casos más notorios fue la denuncia pública del entonces diputado Guillermo Santiago Rodríguez, quien acusó a Betancourt de falsear información sobre el avance de una carretera en el municipio de Arriaga, financiada con 18 millones de pesos. La obra estaba inconclusa, pese a los reportes oficiales que indicaban un avance significativo.
En 2015, empresarios de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) protestaron frente a las oficinas del Inifech, acusándolo de incumplir acuerdos y de bloquear la liberación de contratos, lo que provocó la parálisis de diversos proyectos educativos.
La Auditoría Superior de la Federación también lo implicó en el presunto desvío de más de 200 millones de pesos mediante esquemas de outsourcing en obras como la carretera Ocozocoautla–Villaflores y el Libramiento Sur de Tuxtla Gutiérrez.
Más recientemente, en 2024, militantes de Morena en Cintalapa lo señalaron de intervenir en la elección municipal mediante protestas y toma de oficinas del Instituto de Elecciones, en respaldo al candidato del PT, partido con el que mantenía vínculos.
El nuevo encargo de Betancourt ha generado inquietud entre sectores políticos y sociales, al tratarse de un perfil ligado a prácticas contrarias a la transparencia.
