“Hay gente que a veces no nos valoran nuestro trabajo, que hacemos, pero hay otros que sí valoran, a veces piden regateo y otros que rebajen, pero son accesibles, la verdad son accesibles los precios que nosotros manejamos”.
Después de dos años de pandemia y en donde el turismo en el estado se vino a la baja, la producción y venta artesanías ha sido un trabajo que se ha visto afectado de alguna u otra manera.
Cristina Ruiz – Artesana de San Andrés Larráinzar
“La verdad sí, ha bajado un poco la venta, más cuando hubo esa pandemia…
…ya no hay nada”.
Resilencia y nuevas estrategias de venta fue lo que les dejó la pandemia a las personas que se dedican a la elaboración de artesanías, principalmente las mujeres que son las que se dedican producirlas.
Cristina Ruiz – Artesana de San Andrés Larráinzar
“Sí, nos dedicamos a nuestro trabajo…
… viendo nuestros productos”.
Francelia Méndez – Diseñadora “Anaik’cap Artesanías”
“Diseñamos y confeccionamos las guayaberas, porque lo que es el bordado…
…esto es cultura y tradición”.
Las artesanas, hace mención que las piezas más pequeñas mínimamente lleva de 2 a 3 días de trabajo, y el pago que reciben a cambio es mínimo. Anhelan con que su trabajo sea bien recompensado.
Cristina Ruiz – Artesana de San Andrés Larráinzar
“Por ejemplo, la más sencilla…
…tres días.
Francelia Méndez – Diseñadora “Anaik’cap Artesanías”
“Falta un poco para llegar a eso, que sea bien pagado…
…para que se reactive la economía.
“La gente si regatea, si ofrece…
… es de 600 pesos”.
Estas personas exhortan a que la población no regatee sus artículos, ya que sus materiales y el tiempo que les lleva es una inversión que hacen y esperan recuperar.
Cristina Ruiz – Artesana de San Andrés Larráinzar
“Le explicamos la calidad y el tiempo que nosotros…
… el producto que nosotros hacemos”.
Francelia Méndez – Diseñadora “Anaik’cap Artesanías”
“Invitamos a todos los consumidores que valoren un poquito la artesanía…
…lo importante es vender.