El ZOOMAT, de noche
La noche en el Zoológico Miguel Álvarez del Toro es gozo y misterio.
Los sentidos se agudizan. La vista se acopla a las sombras y el odio capta a las especies que festinan ser más libres.
Si al recorrer sus senderos en el día se aprecia la belleza de la reserva El Zapotal, en la noche es fascinante.Ella es Ixchel, una jaguar negro que al caer la noche, abandona su escondite y merodea en las orillas de su encierro.
Así como Ixchel, son decenas de animales, la mayoría endémicos de Chiapas, que bajo la noche estrellada, con esa confianza se asoman, trepan los árboles.
La experiencia es para todas y todos. Se hace en grupos de 12 personas de 12 a 60 años. A las 8 y a las 9 de la noche.
