En la Calzada del Sumidero de Tuxtla Gutiérrez existe un lugar que ve pasar el tiempo y acrecentar sus servicios. Hace siete años que restaura, rapara y da mantenimiento al medio de transporte que en pleno siglo XXI, por hobby o deporte, lujo o necesidad, ha tenido un nuevo auge, la bicicleta.
El uso masivo del velocípedo en la ciudad se reflejaba en la actividad del taller “Bici Star”, que después de las vacaciones de semana santa ha menguado, pero que al término de estas y en cuanto se reanuden la infinidad de competencias que han surgido, de seguro aumenta.
De a poco crece el interés por el uso de la bicicleta pues se ha vuelto un medio ergonómico que solventa muchas necesidades. Darle mantenimiento es un oficio que roza con el arte y una necesidad cuya tendencia va a la alza.
Con poca luz pero mucha camaradería en “Bici Star”, como en la mayoría de los talleres de bicicleta conversar se torna en un suave fluir. Francisco Pech Fonseca, es mecánico del taller, con singular simpatía suele resolver las necesidades de los ciclistas.
Francisco sugiere que lo más recomendable es dar mantenimiento a la bicicleta cada 3 meses y refiere algunos precios actuales: “para transportarte de tu casa al trabajo, ir a hacer el mandado existen bicicletas desde tres mil hasta 20 mil pesos, esas te sirven perfectamente para transportarte”.
En el taller también labora Jhonatan Cabrera, quien atribuye el auge de las bicicletas a las carreras que se han puesto de moda y que para ellos representa trabajo, mayores ingresos; “un servicio general que sería el engrasado de toda la bici, baleros, ajustes y lavado cuesta hasta 250 pesos”, indicó.
Este 19 de abril se conmemora el Día Mundial de la Bicicleta cuyos beneficios atañen desde la salud, la convivencia, economía, comodidad para desplazarse hasta su amabilidad con el medio ambiente.
El rol de este medio de transporte en términos de movilidad y sustentabilidad, sigue siendo esencial.