
El gobierno de Chiapas autorizó al IGIRD a captar y usar sus propios ingresos por cursos, dictámenes y servicios. Aunque se establecen reglas internas, no hay mecanismos ciudadanos de vigilancia ni claridad en cuánto recauda o cómo se auditará.
Mientras la mayoría de los institutos públicos en Chiapas enfrentan recortes y dependen de presupuesto estatal, el Instituto para la Gestión Integral de Riesgos de Desastres (IGIRD) ahora podrá captar, administrar y gastar su propio dinero, sin necesidad de pasar por el Congreso ni justificar cada gasto públicamente.
Según lo publicado esta semana en el Periódico Oficial, el IGIRD —adscrito a la Secretaría de Protección Civil— podrá generar ingresos por servicios como dictámenes de riesgo, cursos, diplomados, estudios técnicos, validaciones, renta de equipo, certificaciones y hasta arrendamiento de aeronaves o ambulancias.
A diferencia de otros organismos que requieren autorización presupuestal para ejercer recursos, el IGIRD podrá operar sus cuentas de manera directa, emitiendo comprobantes, ejerciendo fondos y asignando gastos sin un control externo visible.
¿En qué puede gastar?
Los lineamientos establecen que los ingresos podrán utilizarse en:
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Acciones preventivas de protección civil
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Atención de emergencias
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Compra de equipo
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Operación de proyectos
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Mantenimiento de aeronaves o ambulancias
Sin embargo, la decisión sobre en qué se usa cada peso recaerá en el propio Director General del Instituto y sus enlaces administrativos, sin ninguna figura ciudadana o independiente que supervise el ejercicio del gasto.
Una bolsa opaca
No se especifica cuánto dinero recauda actualmente el IGIRD, ni cuántos millones podría captar anualmente por sus servicios.
Tampoco se contempla un portal público de transparencia ni se obliga a publicar reportes mensuales accesibles para la ciudadanía. Toda la fiscalización quedará interna, mediante el Sistema Integral de Administración Hacendaria Estatal (SIAHE), lo que impide el seguimiento externo o periodístico sobre cómo se gasta el dinero.
¿Y si hay desvíos?
El documento sí contempla sanciones: quienes usen el dinero indebidamente deberán reintegrarlo con intereses y podrían enfrentar procesos administrativos o penales. Pero esto dependerá de que el propio Instituto lo detecte y lo denuncie.
Además, se autoriza a ajustar el presupuesto en caso de que recauden más de lo estimado, sin requerir aprobación del Congreso o de la Secretaría de Hacienda del Estado. Esto permite modificar montos y usos sin escrutinio público.
¿Quién decide?
Toda la estructura queda en manos de:
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El Director General del IGIRD
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Un Enlace Administrativo
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La Unidad de Apoyo Administrativo
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Áreas operativas como Análisis de Riesgos, Emergencias, Jurídico y Planeación
Para los ingresos relacionados con la ENAPROC (Escuela Nacional de Protección Civil), se integra un Comité Académico, pero sin voz ciudadana o externa.
Puntos críticos
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Sin auditoría pública
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Sin obligación de publicar informes abiertos
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Sin mecanismos de contraloría ciudadana
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Sin claridad sobre cuánto recaudan al año
La disposición fue publicada el 14 de mayo de 2025 en el Periódico Oficial del Estado de Chiapas, bajo el documento titulado “Lineamientos para la Captación, Manejo y Control de los Ingresos Propios del IGIRD”.















