
Maestros y padres de familia de dos telesecundarias en Ocosingo protestaron, exigieron el reconocimiento oficial de las instituciones que llevan casi seis años operando sin claves propias.
Maestros y padres de familia de telesecundarias ubicadas en barrios populares de Ocosingo se manifestaron en Tuxtla Gutiérrez para exigir su regularización. Estas escuelas, que han operado por casi seis años como anexos sin claves oficiales, atienden a más de 100 estudiantes cada una bajo condiciones precarias.
Alejandra Ramos, vocera del movimiento y docente en una de las telesecundarias afectadas, explicó que la falta de claves propias impide a las instituciones acceder a programas sociales como becas, desayunos escolares y recursos para infraestructura. “Nuestras aulas son improvisadas, hechas de madera, lo que afecta la calidad educativa que podemos ofrecer”, señaló.
Además, Ramos denunció que las autoridades han manifestado la intención de retirar a los actuales docentes para sustituirlos por maestros de apoyo o becarios con contratos temporales. “Esto no solo vulnera nuestros derechos laborales, sino que también pone en riesgo la continuidad educativa de los alumnos”, afirmó.
Héctor Solís, otro de los maestros afectados, señaló que esta situación no es exclusiva de Ocosingo, sino que refleja un problema estructural en Chiapas. “Desde 2013 no se han creado nuevas plazas para telesecundarias, lo que ha llevado a muchas escuelas a operar de manera irregular”, explicó.
Solís subrayó que las dos telesecundarias en cuestión han logrado egresar a tres generaciones de estudiantes, a pesar de las condiciones adversas. Sin embargo, advirtió que la falta de reconocimiento oficial limita su capacidad para ofrecer una educación digna y pone en riesgo su continuidad.
Los manifestantes exigieron a las autoridades estatales y federales la asignación de claves oficiales para ambas instituciones, así como la garantía de recursos para mejorar la infraestructura y la reinstalación de los docentes que han sido cesados por procesos burocráticos.
“Es indispensable que el gobierno estatal entrante, encabezado por Eduardo Ramírez Aguilar, priorice el derecho a la educación. No podemos permitir que se sigan destinando recursos a proyectos empresariales mientras nuestros niños estudian en condiciones deplorables”, enfatizó Ramos.


























