
La tradición de la Tía Anita en Residencial La Hacienda, en Tuxtla Gutiérrez, espera reunir a más de 14 mil niños el 1 de noviembre en una celebración que lleva más de 35 años uniendo a familias chiapanecas.
Este 1 de noviembre, la casa de la “Tía Anita” abre sus puertas para recibir a miles de niños en busca de dulces y alegría. En esta celebración, que ya es una tradición en Residencial La Hacienda, se espera una asistencia de más de 14 mil niños, quienes podrán disfrutar de cerca de tonelada y media de dulces recolectados especialmente para esta ocasión.
Juan Carlos Mendoza Castañeda, hijo de la “Tía Anita” y organizador del evento, ha dispuesto que la celebración inicie una hora antes, a las 17:00 horas, para dar prioridad a los más pequeños. Con el apoyo de la Cruz Roja, Tránsito y Protección Civil, la seguridad de los asistentes está garantizada, y se hace un llamado a que los visitantes acudan sin el consumo de bebidas alcohólicas, recordando que “este es un evento familiar y de convivencia” .
La tradición de la “Tía Anita” comenzó cuando su madre, una mujer generosa y amante de las costumbres, notó que los niños de la familia solo recibían los típicos dulces de calabaza y decidieron compartir con ellos algo más especial. Con el tiempo, esta celebración se transformó en un evento masivo que ahora convoca a miles de personas. “Esto no tiene precio; es una oportunidad para dar algo de lo que la vida nos da y fomentar la convivencia familiar”, comenta Juan Carlos.
En cada edición, esta fiesta no solo preserva la alegría de los niños, sino que también fomenta la unión comunitaria, siendo un ejemplo de cómo una tradición puede mantener vivo el legado de una familia y fortalecer los lazos en la comunidad.



























