
Tras lograr la hazaña olímpica de ser la mejor sexta clavadista del mundo a sus 19 años, Alejandra Estudillo regresó a México, a Chiapas, donde expresó su orgullo por la tierra que la vio nacer.
El 9 de agosto, Alejandra paralizó a todo el país. Ella recuerda cuando estuvo al borde del trampolín y dijo que no dimensionó el impacto que estaba generando en la tierra que la vio nacer.

Es multimedallista de Nacionales y en el extranjero su desempeño es impresionante, en competencias en Chile, Perú, Qatar, China y ahora en Francia; sus logros, ahora son el reflejo de nuevas generaciones.
Alejandra es un orgullo para México, para Nuevo León y para Chiapas y ella, es el orgullo de su papá y su mamá, quienes se expresaron para la cámara de Alerta Chiapas, al recordar que salieron de Ixtacomitán y fue así como su hija se preparó en el Estado de México y Nuevo León.

París 2024 terminó, ahora la meta de Alejandra está fija en los Juegos Olímpicos 2028 en Los Ángeles.


























