
María es el nombre anónimo de una mujer que tuvo que abandonar Nueva Independencia, en Ángel Albino Corzo y refugiarse en un municipio cercano, junto con su familia, ante el asedio del crimen organizado.
A pesar de que su esposo se resistía a abandonar sus terrenos de cultivo de café, fue cuando el 15 de julio, hombres armados llegaron a la comunidad y comenzaron a llevarse a varios, presuntamente para reclutarlos.
Los reportes indican que también hay personas desaparecidas en las comunidades Laguna del Cofre y Llano Grande, de Montecristo de Guerrero, no obstante no ha habido información oficial que permita conocer más sobre este suceso.
María cuenta que su esposo se salvó porque había ido por herramienta en una escuela telesecundaria; ella al ver las camionetas y ante los rumores de que eso ya estaba pasando, decidió refugiarse en su patio, aunque reconoció que a su domicilio no ingresaron.
En notas informativas, ha circulado que las personas reclutadas, han sido utilizadas para realizar bloqueos y evitar que ingresen elementos del Ejército Mexicano, de ello tampoco ha habido comunicación oficial donde se mencione si hay operativos de ingreso.
Lo cierto es que María y su familia tuvieron que abandonar su vivienda y su modo de vida, por el temor de ser reclutados por los criminales.
En donde está ahora, en la casa de una familia amiga, ha encontrado a personas con las que convivía, por ellos pudo conocer que hay personas que sí están desaparecidas y que están desesperadas.
La cabecera de Ángel Albino Corzo (antes La Concordia), La Concordia, Tuxtla Gutiérrez, entre otros, son los municipios donde la gente se está desplazando, aunque algunos de ellos también sufren la violencia de los grupos armados.
Lamenta lo que pueda pasar y el futuro de su vivienda y sus terrenos de café, principalmente porque es el sustento familiar y que lo que sacaban de ahí, lo vendían a un intermediario y ahí lograban obtener dinero seguro; ahora, solo tienen la voluntad de la familia que los apoya.


























